Orlando Magic se ha convertido en la sorpresa de los playoffs NBA, tras ganar la Conferencia Este y plantarse en su segunda final NBA. El camino del equipo entrenado por Stan Van Gundy, que partía con el tercer mejor récord de su conferencia, no ha sido nada sencillo. En primer ronda, los Magic sufrieron para derrotar a los Philadelphia 76ers de Miller e Iguodala, tras perder el primer partido en casa. El partido que lo cambió todo fue el sexto y decisivo, ya que el mejor jugador de Orlando, Dwight Howard, fue sancionado por dar un codazo en la cara al pivot de los 76ers, Sammy Dalembert, y no pudo jugar. El equipo, liderado por el turco Hidayet Turkoglu, hizo el mejor partido de la temporada, ganando su pase a semifinales en Philadelphia, cuando más complicada se ponía la situación.
En semifinales, los Magic se enfrentaron a los vigentes campeones, los Boston Celtics. Fue una serie larga, plena de emoción y grandes partidos, que se decidió en Boston, en el 7º partido, a favor de unos Magic que parecían lanzados.
Si dura fue la semifinal, que decir de la mejor final de Conferencia de la década, disputada ante los Cavaliers de Lebron James. Cuando nadie daba un céntimo por Orlando, los Magic demostraron tener el antídoto para derrotar al equipo de Ohio, dejando que Lebron James logrará los mejores números de la historia, en una serie al mejor de 7, pero anulando al resto de sus compañeros.
Orlando, esta vez, puedo celebrar su pase a la final en su propio feudo, derrotando a Cleveland en el 6º partido, en el que Howard, con 40 puntos, confirmó su presencia entre los 5 mejores jugadores de la liga
Stan Van Gundy tiene a su disposición una plantilla compensada, con mucho talento en caso todas las posiciones. El técnico, hermano del ex entrenador de los Knicks y Rockets Jeff Van Gundy, ha dado un salto de calidad en estos playoffs, consiguiendo llevar a sus hombres a un objetivo que parecía imposible, jugar la Final, y a pesar de ser criticado por un Dwight Howard, molesto con la excesiva caña que su técnico da al equipo cuando las cosas no van bien. Al final, el ex entrenador de los Miami Heat ha demostrado su maestría, ganando de calle su duelo ante Mike Brown, entrenador de los Cavaliers y que fue nombrado Entrenador del Año
La baja del base titular, Jameer Nelson, en el mes de febrero, cambió los planes de la franquicia de Florida. El General Manager, Otis Smith hizo un movimiento maestro, obteniendo al base de los Rockets, Rafer Alston, un base veterano, más conocido por ser una de las estrellas del Streetball en Estados Unidos, bajo el apodo de "SKIP TO MY LOU". Alston, que pasó un duro periodo de adaptación a su nuevo equipo, pero en la serie ante Cleveland, Alston ha sido decisivo, jugando el mejor baloncesto de su carrera ante el All Star, Maurice Williams.
Como escolta, los Magic han apostado por el novato Courtney Lee, uno de los descubrimientos de la temporada, y al que no le ha temblado el pulso en los momentos importantes de los Partidos. Un magnífico defensor, que ha resuelto el gran problema de los Magic en temporadas anteriores, el puesto del escolta.
El turco Hidayet Turkoglu es el alero del equipo. Su juego en estos playoffs le va a proporcionar un contrato de estrella este verano. Un jugador con mucho talento y conocimiento del juego, que ha pecado de falta de intensidad en algunos momentos de su carrera. Ante Boston y, sobre todo, ante Cleveland, Turkoglu ha sido el líder del equipo, jugando muchos minutos con base, a pesar de sus 2,05m.
Rashard Lewis comparte con Turkoglu la posición de alero. Un buen defensor interior, que juega siempre fuera de la línea de tres puntos, donde es uno de los mejores especialistas de la liga. A pesar de tener uno de los contratos más altos de la NBA, Lewis nunca ha dado su máximo nivel, aunque en estos playoffs, ha demostrado el acierto de su fichaje.
Por último, el mejor pivot de la NBA, Dwight Howard, completa el quinteto. Apodado "Superman" tras ganar el concurso de mates del año pasado, Howard se ha convertido en el sucesor de Shaquille O´Neal tanto en los Magic como en la propia NBA. Un jugador imposible de defender si recibe el balón dentro de la zona, y que terminó de consagrarse en el 6º y definitivo partido de la serie ante Cleveland, anotando 40 puntos, siendo el catalizador del ataque de su equipo. Un jugador devastador que será el principal quebradero de cabeza de Phil Jackson y los Lakers.
Desde el banquillo, Van Gundy utiliza regularmente sólo 3 jugadores: el veterano base Anthony Johnson, cuyo mayor virtud es la serie y la defensa; el alero francés Mickael Pietrus, clave en la defensa a Lebron James, y que suele aportar muchos puntos desde el banquillo; y el pívot polaco Marcin Gortat, suplente de Howard, que ha conseguido asentarse en la rotación gracias a su sacrificio y su físico privilegiado. Dos jugadores más, el pivot Tony Battie y el escolta tirador JJ Reddick tendrán minutos ante los Lakers, aprovechando sus centímetros y experiencia en la liga (Battie) y su excelente capacidad de anotación (Reddick).
Además, desde Orlando se apunta al regreso de Jameer Nelson para la final, una idea que el propio Otis Smith ha desestimado, no sólo por el aspecto físico, sino por que la llegada de Nelson pueda romper la dinámica del equipo. En caso de producirse, Nelson sería un grave problema para los Lakers, ya que los californianos no juegan con un base puro, y Nelson siempre ha hecho buenos partidos ante los angelinos.
Stan Van Gundy utiliza dos conceptos básicos en ataque : siempre partiendo en una situación de 4 jugadores abiertos y Howard, sólo, dentro de la zona, Orlando busca el juego de balón dentro-fuera, con Howard siendo el inicio de la mayoría de las jugadas de ataque. En caso de que el equipo rival sobre marque al pivot, Orlando busca siempre una rápida circulación de balón entre los exteriores, forzando el pase extra que deje a alguno de los excelentes tiradores de 3 puntos en una situación de ventaja para tirar o penetrar.
En defensa, Orlando es un equipo muy sólido, que marca la línea de presión muy arriba, sabiendo que si un jugador exterior rival penetra, Howard y Lewis estará ahí para taponarle. Esta agresividad defensiva, el ansia por taponar cualquier tiro, provoca muchas faltas de Howard, su principal talón de Aquiles y principal arma que usarán los Lakers para tenerle en el banquillo el mayor tiempo posible.
• Los Lakers necesitan dominar el rebote. Bynum no ha jugado a buen nivel, y ante Howard, puede dejar todas sus limitaciones aún más claras, por lo que Pau Gasol, como Lamar Odom deberán multiplicarse para hacer su trabajo y el del joven pivot, evitando otro partido de Howard por encima de los 20 rebotes.
• Orlando necesita controlar el ritmo del partido. Tanto Alston como Turkoglu son superiores a sus pares, con lo que los Lakers deberían recuperar al mejor Derek Fisher de la temporada si quieren tener opciones.
• Pietrus y Turkoglu han hecho un gran trabajo sobre Lebron James, a pesar de sus increíbles estadísticas en la serie. Sin embargo, Kobe Bryant es un jugador más completo que "King James", tanto por su velocidad como por su rango de tiro. A pesar de todo, Kobe debe aliarse con Pau Gasol si quiere ganar su cuarto anillo.
• Ni Orlando ni Lakers disponen de grandes banquillos. Pietrus y Odom son los dos únicos jugadores con galones de titulares, con lo que cualquier aportación puntual de jugadores como Shannon Brown, Luke Walton, Josh Powell o Vujacic pueden marcar la diferencia para los Lakers.
• Por último, el duelo Pau Gasol – Rashard Lewis debe ser decisivo para la suerte de la serie. Mientras Pau es un jugador interior, Lewis vive fuera de la zona para aprovechar su calidad como tirador. Si Pau se ve forzado a alejarse de la canasta, el de Sant Boi va a sufrir mucho. Por contra, si Odom juega muchos minutos, será él y no Pau quién la marque, quedándose Pau como marcador de Howard, más rápido, más fuerte, pero un pivot, al fin y al cabo.
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