El equipo colegial salvó la temporada ante sus aficionados, derrotando a su eterno rival. La victoria, oficialmente, salvo a los de Luís Casimiro, evitando vivir una situación dramática en las dos últimas jornadas.
El partido, que arrancó con una monumental empanada del Real Madrid (0 puntos en los primeros 4 minutos), estuvo marcado por los problemas físicos de parte de los jugadores de Joan Plaza. A la baja de Mumbrú, se unió los problemas de Van den Spiegel y Winston, que sólo pudieron completar un entrenamiento. Contando con la baja no cubierta de Pepe Sánchez, y contando con que Felipe apenas hizo un par de entrenamientos con sus compañeros, tras perderse dos partidos, los de Plaza contaron con una reducida rotación de 7 jugadores con la que afrontar un partido vital para su rival.
Las zonas mixtas de Luis Casimiro dieron un resultado excelente, ya que los madridistas acabaron la primera parte con un 30% en el tiro. Demasiados tiros abiertos fallados por Raúl López, por Marko Tomas y por Axel Hervelle, que fue insultado gravemente nada más pisar el Madrid Arena, y que en ningún momento estuvo metido en el partido.
A pesar de todo, el Madrid tuvo opciones de ganar el partido tras remontar 9 puntos en el tercer cuarto. Gracias a Bullock y a los rebotes de Felipe Reyes (32 de valoración), los blancos se situaron 45-46 tras unos minutos de buen baloncesto.
Fue un espejismo, ya que un 8-0 puso las cosas en su sitio para Estudiantes, en los que destacaron Pancho Jasen (15 puntos, y eso que era duda), Corey Brewer (sus penetraciones penalizaron los numerosos despistes defensivos) y el hipermotivado Petar Popovic, que se pasó el partido provocando a sus rivales, pero que supo pedir perdón nada más acabar el partido. Un gesto espontáneo que le honra.
Al final , 71-63 para el Estu, que uan vez salvado deberá rezar para que un nuevo patrocinador tome el relevo de MMT si quieren volver a ser equipo ACB la próxima temporada.
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